Senescyt presentó sus principales avances en temas de discapacidad.

Crear estrategias conjuntas que permitan garantizar la igualdad de oportunidades en la educación superior fue el objetivo de las jornadas de trabajo sobre inclusión, discapacidades y derechos humanos, organizadas por la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), la Universidad Metropolitana y la Red InterUniversitaria Latinoamericana y del Caribe sobre Discapacidades y Derechos Humanos.

María Isabel Moncayo, directora de Formación Académica de Posgrado de la Senescyt, indicó que la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES) y la Constitución del Ecuador disponen que todas las personas, sin discriminación de sus condiciones socioeconómicas, de movilidad o discapacidad, tengan las mismas posibilidades de acceso, permanencia, movilidad y egreso dentro del sistema educativo.

Añadió que estas leyes, entre otras regulaciones, exigen a las instituciones de educación superior disponer de instalaciones con las condiciones necesarias para que las personas con discapacidad puedan desarrollar sus actividades, potencialidades y capacidades.

Además, las instituciones educativas deben generar proyectos y programas para atender las necesidades educativas especiales de la población que así lo requiera, por medio de la creación de una unidad de bienestar. 

Logros

Moncayo destacó que en 2017 fueron 1.078 las personas con discapacidad que obtuvieron un cupo para acceder a las instituciones de educación superior. Y que en el primer semestre de 2018 son 408 los postulantes que lo hicieron.

En cuanto al programa de becas, 819 personas con discapacidad accedieron a una beca para realizar sus estudios dentro del Ecuador, y 64 tuvieron la oportunidad de formarse en universidades del exterior, en el 2018.

Sandra Katz, coordinadora de la Red InterUniversitaria Latinoamericana y del Caribe sobre Discapacidades y Derechos Humanos, felicitó a Ecuador por promover espacios para el intercambio de experiencias y conocimientos, “lo cual permite desarrollar propuestas que fomenten una comunidad universitaria regional inclusiva”.

Informó que su red busca reafirmar los derechos humanos de las personas con discapacidad, promoviendo conciencia en los ámbitos académicos y de gestión de políticas de educación superior, buscando erradicar de forma definitiva la vida universitaria, el prejuicio y la discriminación.

Finalmente, Tatiana Rosero, secretaria Técnica de Discapacidades, aseveró que trabajar para que las personas con discapacidad tengan una vida en completo goce de sus derechos es competencia de todas las instituciones, sean públicas o privadas.

Manifestó que para el Gobierno es un tema prioritario lograr igualdad de oportunidades, por lo que se seguirán promoviendo políticas públicas que hagan del espacio educativo un entorno no excluyente.

A las jornadas asistieron representantes de las instituciones de educación superior del país, quienes socializaron los logros alcanzados por sus centros de estudios en cuanto a inclusión, discapacidades y derechos humanos.