Hernán Hormazábal: “Los Derechos Humanos en vías de mejora en el Ecuador”
Boletín de Prensa No. 003
Quito, 7 de enero de 2014
Prometeo español investiga el caso de tres ecuatorianos asesinados en la dictadura de Pinochet
Hernán Hormazábal, catedrático de Derecho Penal Internacional y especialista en Protección Penal de Derechos Humanos, actualmente vinculado al Proyecto Prometeo, investiga la aplicabilidad del derecho penal internacional en materia de Derechos Humanos. Además, dicta clase en este campo en la Universidad Andina Simón Bolívar (UASB).
En la Fiscalía General del Estado realiza la investigación y enjuiciamiento a responsables de crímenes internacionales de tres ecuatorianos en la dictadura de Pinochet: Sócrates Ponce Pacheco, Felipe Porfirio Campos Carrillo y Freddy Jimmy Torres Villalba. Hormazábal ha sido una pieza clave en este caso. Sobre esto comenta:
Estos ciudadanos ecuatorianos fueron asesinados bajo la dictadura de Pinochet en septiembre de 1973. El Fiscal General del Estado, Galo Chiriboga, fue informado de estos crímenes de lesa humanidad. El caso más conocido fue el de Sócrates Ponce Pacheco, ejecutado en el Estadio Nacional de Chile, el mismo escenario donde también asesinarían a Víctor Jara, cantautor chileno.
Sobre esto hay que añadir que los familiares de las víctimas han sufrido más de cuarenta años el dolor de la pérdida y la impunidad. Estos familiares tienen el derecho de exigir protección y asistencia al Estado ecuatoriano, y desde esta perspectiva, el Fiscal General habló con la viuda de Sócrates Ponce Pacheco y dio instrucciones para que se ubique a los familiares de las otras víctimas.
Actualmente, se encuentra vinculado a la Comisión de la Verdad y de Derechos Humanos, resuelve casos concretos de violaciones constitutivas de crímenes internacionales y los problemas jurídicos puntuales que se presentan. Al respecto, Hormazábal comenta que al tratarse de crímenes internacionales, de graves consecuencias en violaciones de los Derechos Humanos, es decir, de crímenes cuyos autores son agentes del Estado tienen el mandato de respetarlos. Los Derechos Humanos tienen un carácter universal, su violación no es un asunto interno del Estado en el que se producen, es un problema que trasciende las fronteras de los Estados. Por eso, no se puede admitir la impunidad y la responsabilidad de los autores debe poder perseguirse sin importar el lugar y el tiempo en que se hayan cometido y su nacionalidad. Este es el fundamento de una demanda que tiene cada vez más fuerza, el de una justicia universal. Al fundamento anterior, por si ya suficiente, se añade un plus para Ecuador, la nacionalidad ecuatoriana de las víctimas.
De otro lado, existen variantes, por ejemplo, en un caso penal, el acusado goza de la presunción de inocencia que también es un derecho humano. Es decir, en el proceso hay que aportar pruebas que permitan enervarla conforme al estándar “de más allá de toda duda razonable”. Esto es complejo, sin embargo, después de 40 años de los hechos, hay que añadir que se trata de crímenes de Estado que los autores cometen extremando cuidados en el momento de su comisión y borrando huellas con posterioridad para garantizarse la impunidad. No obstante, la experiencia demuestra que pueden lograrse condenas de violadores de derechos humanos con absoluto respeto de las garantías del Estado de Derecho que ellos negaron a sus víctimas.
Este Prometeo, considera que en el Ecuador, la situación de los derechos humanos está en franca vía de mejora. Administrativamente con órganos específicos de Derechos Humanos y judicialmente con el procesamiento de los autores de estos crímenes específicos. A ello contribuye el Convenio Americano de Derechos Humanos y las sentencias vinculantes de la Corte Interamericana; y, en la aplicación práctica, la Fiscalía y el rigor jurídico demostrado por los Tribunales. A esto hay que añadir la toma de conciencia de las universidades de la necesidad de incorporar a sus planes de estudio el derecho internacional de los derechos humanos. Creo que en este último punto puedo hacer mis aportes como Prometeo.