Por primera vez en la historia del país, el Ecuador cuenta con la tecnología necesaria para investigar en el Golfo de Guayaquil 

Con el objetivo de recolectar muestras para estudiar la estructura sísmica del sedimento marino y riesgos geológicos del Golfo de Guayaquil, el lunes, en horas de la mañana, zarpó el buque científico Orión de las costas ecuatorianas. Esta expedición está a cargo del Instituto Oceanográfico de la Armada del Ecuador (Inocar), que mantiene un convenio de financiamiento con la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (SENESCYT), por un monto aproximado de USD 1´970 000, durante tres años.

La expedición en el Buque Orión, de fabricación japonesa y perteneciente a la Armada desde 1981, realiza sus investigaciones con una tripulación compuesta por 30 personas que forman parte del personal de la embarcación y 10 científicos del Inocar.

Según Marcos Santos, Director del Proyecto, la expedición cuenta con un equipo holandés de perfilación acústica denominado Sparker Boomer, que será utilizado por primera vez en aguas ecuatorianas, cuyo trabajo es generar ondas eléctricas y sonido dentro del agua, que penetran en los estratos sedimentarios para que a su retorno permitan estudiar el terreno. Este equipo está valorado en USD 350 000.

Con este trabajo se podrá identificar la estructura de las capas del fondo marino, para poder reconocer si existen fallas que podrían generar riesgos, tales como tsunamis o deslizamientos del terreno. Asimismo, determinará la pertinencia de construir en medio del Golfo de Guayaquil. Otro de los beneficios que traerá esta investigación es encontrar potenciales fuentes de hidrocarburos y de reserva natural.

La expedición del buque Orión es la primera de su tipo en el país, en vista de que en años anteriores, este tipo de investigaciones estaban a cargo de embarcaciones extranjeras, ya que el país no contaba con la tecnología necesaria para realizar estas tareas.